Agenda 2030: integrar la dimensión ambiental al desarrollo de los países

A los avances que ha realizado la región para implementar la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible, se suma el compromiso de los países en una nueva Agenda Medioambiental Iberoamericana. Ejemplos y buenas prácticas de planificación desde el territorio.

Agenda 2030: integrar la dimensión ambiental al desarrollo de los países

Los países de la región han realizado avances relevantes y sostenidos en lo que concierne a la institucionalidad y los instrumentos para implementar la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.  

Algunos datos los aporta la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, (CEPAL)en el Informe de avance cuatrienal sobre el progreso y los desafíos regionales de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.   

Según este documento, la mayoría de los países de la región han creado o utilizan mecanismos nuevos o preexistentes de coordinación para la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) 

Teniendo en cuenta que, a nivel mundial, 17 países habrán presentado al menos 2 informes nacionales voluntarios entre 2016 y 2020, el hecho de que 7 de ellos sean de América Latina y el Caribe muestra el compromiso de la región con la Agenda 2030. 

 

Liderazgo 

Además de la creación de mecanismos de coordinación, se ha comprobado que en la región existe el liderazgo político que precisa la Agenda 2030. 

Para el caso de las metas medioambientales, el informe demuestra que en la mayoría de los países de la región, la principal autoridad ambiental nacional forma parte de la máxima autoridad de implementación de la Agenda 2030 

Recientemente, los ministros y ministras de Medio Ambiente de Iberoamérica, en el marco de la XXVII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobiernoacordaron impulsar una agenda medioambiental iberoamericanay reafirmaron sus compromisos con la acción climática (mitigación, adaptación y medios de implementación) en línea con el Acuerdo de París y la Agenda 2030. 

Esta Agenda buscaráconsolidar el intercambio de información ambiental, la cooperación y la coordinación de las redes existentes en la región, como laRIOCC(Red Iberoamericana del Cambio Climático), CODIA (Conferencia de Directores Iberoamericanos del Agua) y CIMHET (Conferencia de Directores de los Servicios Meteorológicos e Hidrológicos Iberoamericanos), y el apoyo del Observatorio Iberoamericano de Desarrollo Sostenible y Cambio Climático de La Rábida (Huelva, España). 

 

Dimensión ambiental en la planificación del desarrollo 

Por su parte, eObservatorio Regional de Planificación para el Desarrollo de América Latina y el Caribellama a tomar medidas urgentes para abordar la emergencia climática, aún cuando se estima una reducción de emisiones de 6% en 2020 a causa de las restricciones de movimiento y la recesión económica mundial a causa de la pandemia de la COVID-19. 

En un reciente análisis de noviembre de 2020, dice que todo indica que esto apenas tendrá un efecto temporal volviendo a los niveles anteriores una vez se reactiven las economías, y que por ellose hace fundamental tomar medidas urgentes para abordar la emergencia climática. 

En ese sentido, ha hecho un esfuerzo para analizar ejemplos de como se integra la acción por el clima en los planes nacionales de desarrollo en los países de América Latina y El Caribe. 

Entre ellos se destacan acciones como el incluir la adaptación al cambio climático en el diseño de las políticas regionales y locales en Perú, o promover el ordenamiento territorial integral para la adaptación al cambio climático y mitigación de sus efectos en Guatemala. 

 

Adaptación local y territorial 

Por otra parte, han identificado iniciativas de territorialización de la Agenda 2030que muestran la importancia de la cooperación y la participación ciudadana. 

Como ejemplo de ello, Paraguay inició en 2018 la implementación del proyecto “Asunción Ciudad Verde de las Américas–Vías a la Sustentabilidad”, con el apoyo del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM-GEF), el PNUD y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).  

La iniciativa aborda problemas urbanos como el transporte, la eliminación de residuos sólidos y la gestión de áreas verdes, con base en la participación de la población y en criterios de equidad e inclusión 

Este proyecto se relaciona con los ODS 12 (Producción y consumo responsables), 13 (Acción por el clima) y 15 (Vida de ecosistemas terrestres), y se centra particularmente en la aplicación a nivel local del ODS 11 (ciudades y comunidades sostenibles).